La base de Maquillaje ideal

La base de Maquillaje ideal


base de Maquillaje ideal
La Base de Maquillaje ideal y su Propósito

La base de maquillaje es exactamente lo que la palabra significa: la base de un rostro hermoso. El propósito de la base de maquillaje es ocultar las imperfecciones y emparejar la piel. Su propósito no es ocultar el rostro, resaltar las imperfecciones inevitables o llamar la atención a los demás. Es la base elemental sobre la cual se muestran nuestras mejores facciones.

Tipos de base de maquillaje

La base viene en tres formas básicas: líquida, en crema y en polvo. Gracias a estas tres formas, han surgido diversas combinaciones tales como base en mousse, base en crema-polvo, base mineral y humectante con color.

Las bases también pueden contener fórmulas especializadas para satisfacer las necesidades de los tipos específicos de piel. Por ejemplo, las bases para piel sensible, las bases para piel grasa y las bases para piel seca. Hay incluso bases de maquillaje para la rosácea, las marcas de nacimiento y las cicatrices.

Hay muchos tipos de bases para elegir, así que comencemos con las principales: líquida, en crema y en polvo.

La base viene en tres formas básicas: líquida, en polvo y en crema. Con estas tres formas, han surgido diversas combinaciones tales como base en mousse, base en crema-polvo, base mineral y humectante con color.

Las bases también pueden contener fórmulas especializadas para satisfacer las necesidades de los tipos específicos de piel. Por ejemplo, las bases para piel sensible, las bases para piel grasa y las bases para piel seca. Hay incluso bases de maquillaje para la rosácea, las marcas de nacimiento y las cicatrices.

Hay muchos tipos de bases para elegir, comencemos con las principales: líquida, en polvo y en crema.

Líquida

Las bases líquidas son geniales porque son fáciles de aplicar y dan un aspecto muy natural. Las bases líquidas ofrecen una cobertura media. Son buenas para la piel seca debido a su alto contenido humectante. Busca bases líquidas que no contengan aceite. Las marcas como Clinique y Clarins tienen una serie de bases formuladas para todos los tipos de piel

Base en Polvo / Bases Crema-Polvo

La base en polvo viene como polvo suelto o como polvo compacto. Este tipo de base se utiliza a menudo para colocar una base rápida en un rostro que solamente necesita arreglarse un poco para la noche o para fijar el maquillaje ya colocado. Es una elección excelente para aquellas mujeres con piel grasa o para colocar maquillaje cuando hay mucha humedad en el ambiente. Estas bases combinan la suavidad y la cobertura perfecta de una crema con la sequedad y la fijación del polvo. Es una base muy buena para aquellas mujeres con piel combinada o para las que no tienen suficiente tiempo para maquillarse. Cada minuto ahorrado vale.

Base en Crema

La base en crema ofrece una cobertura excelente sin imperfecciones. Las bases en crema vienen en barra o a manera de maquillaje compacto. Se aplican rápida y fácilmente. Las bases en crema son tan versátiles que pueden ser utilizadas como corrector. Con un alto contenido humectante, la base en crema es la elección perfecta para aquellas mujeres con piel seca. Busca cremas que contengan hidratante para obtener un acabado suave. La base en barra de Arbonne contiene ingredientes botánicos para mejorar la calidad de la piel. Un producto que recomiendo probar es Cover FX . Esta base en crema viene a manera de maquillaje compacto y los dermatólogos la recomiendan para la rosácea y el acné.

Una aliada indispensable para la base de tu maquillaje. Sin embargo, no siempre es sencillo elegir la que mejor te va entre las opciones que existen. Si te has equivocado al elegirla, toma nota de estos consejos que te ayudarán la próxima vez.

1.- Hay que buscar el producto más adecuado a nuestro tipo de piel. Libre de aceites para cutis grasos o mixtos; más nutritivo para los secos o muy emoliente para las pieles maduras. De esta forma, tiene también una acción de tratamiento y evitamos reacciones indeseadas.

2.- Después, hay que apostar por la cobertura deseada, más ligera cuanto más natural sea el efecto buscado. Si, por el contrario, se necesita tapar más las imperfecciones, conviene una fórmula más cubriente.

3.- Este paso talvez es el más complicado: elegir el color. No olvidemos que ha de ser siempre, siempre, ¡siempre! exacto al de la tez. A veces es tentador escoger uno más oscuro, para verse algo más morena, pero pensemos en el implacable paso del tiempo: la base que recién aplicada se ve tostada, al cabo de cinco horas queda a manchas, algo que pasa desapercibido si es del mismo tono de la piel. Por cierto, la única manera de asegurarse cómo queda la base de maquillaje sobre el cutis es probándolo. El test más adecuado pasa por extender varios trazos de diferentes colores en la zona de la mandíbula, darles unos minutos y esperar: el que quede más invisible al cabo de ese tiempo es el correcto.

La base de la base

- Tener una piel perfecta, que solo se consigue con un cuidado diario: dieta sana, mucha agua, adiós al tabaco y al alcohol y protección contra el sol.

- Que esa piel pefecta esté completamente limpia. Antes de maquillarse, usar un limipador suave que no deje la piel tirante, que el rostro parezca relajado.

- Aplica una hidratante muy ligera, que no sea excesivamente nutritiva ni densa.

- Buscar la luz directa para que no te hagas sombra, pon el espejo a suficiente distancia para ver dónde están las zonas oscuras (normalmente, alrededor de los ojos, de la boca y de la nariz).

- Métete en la cabeza que hay que dar la base poco a poco, en pocas cantidades y mezclarlo siempre a golpecitos, hasta que desparece. Para zonas delicadas como el contorno de ojos, usa la yema del dedo anular, ya que es el más suave de todas (porque la usas menos).

Más consejos por Lorenita ;)

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